La suplantación de identidad es uno de los flagelos más comunes hoy en día. El robo de identidad en el ámbito digital inicia con la sustracción de la información que identifica a la persona con métodos como el phishing, smishing, vishing, spam, etc. Los delincuentes acceden a claves, fotografías, nombres de usuario, y demás datos, y los usan para hurtar dinero depositado en cuentas de ahorros, tarjetas de crédito, adquirir servicios, comprar bienes o cometer otros delitos.
La ciudad con más denuncias de fraude de suplantación de identidad sigue siendo Bogotá, con más de 5000 casos a diciembre de 2021, seguida de Medellín y Cali, con casos que rondan los 2500 y 1800 respectivamente.